"— Creí que era, «Si un cuerpo coge a otro cuerpo» —le dije—, pero, verás. Muchas veces me imagino que hay un montón de niños jugando en un campo de centeno. Miles de niños. Y están solos, quiero decir que no hay nadie mayor vigilándolos. Sólo yo. Estoy al borde de un precipicio y mi trabajo consiste en evitar que los niños caigan a él. En cuanto empiezan a correr sin mirar adonde van, yo salgo de donde esté y los cojo. Eso es lo que me gustaría hacer todo el tiempo. Vigilarlos. Yo sería el guardián entre el centeno. Te parecerá una tontería, pero es lo único que de verdad me gustaría hacer. Sé que es una locura."
Jerome David Salinger - "El guardián entre el centeno"
Echando de menos lo que nunca fue de más,
llevo dos años en huelga ya, como mis lágrimas,
un "te quiero" escrito con sangre seca en los baños del bar,
una copa lleva hielos a tu boca.
Un tipo frío con corazón de roca,
con felicidad (poca), con buen gusto (en la ropa),
venté pa' acá que te lo explicará mi tropa,
en el Bataplan bebiendo ron, esnifando farlopa.
¡Hasta el día en que me muera primo!
Pidiendo paz y dando guerra, me tendréis hasta en la sopa,
tú chupa y calla... puta,
tengo a muchas como tú limpiando aseos, aprendiendo el kamasutra,
a tus amantes tiroteo, comparados con este poeta bohemio son pecata minuta.
Una sucia chusta, chico,
vivo sólo y como puedo, sobreviviendo a esta vida injusta,
a estas idas y venidas que me resultan...
Cien días de ayuna y una depresión absoluta.
Sore
JimmyAttitude
No hay comentarios:
Publicar un comentario